"Las valquirias son deidades femeninas de la mitología nórdica. Su propósito era elegir a los más heroicos de aquellos caídos en batalla y llevarlos al Valhalla donde ellas sanarían sus heridas".
¿Que por qué escribir ahora en este blog?
Porque sí, porque después de mucho tiempo necesitaba hacer un punto y aparte, marcar el límite de lo que fui, y de lo que soy.
Sin más silencios que contar... Valquiria
Porque sigo teniendo miedo.
Tengo miedo a las sombras en la oscuridad, miedo a los sueños imposibles, miedo a mis limitaciones, miedo en parte... a mí misma, y a llegar a mi tope, y a no poder dar más.
Porque sigo soñando despierta.
Con mundos donde no existen monstruos, donde no importa el error sino lo que aprendiste de él, donde no existen complejos, ni malas miradas, ni el espejo se ríe de ti en tu cara.
Sin embargo ya todo me da más igual. Ahora tengo otras razones por las que luchar un tiempo más.
Tengo un alma llena de arte (o eso intento), tengo un proyecto de futuro (no tan estable como quisiera, pero no me gustaría que fuera de otra manera), y tengo... tengo...
Además de por lo que he dicho antes, escribo por miradas indiscretas que no esperan sino encontrar algo más de lo que yo soy, aunque en casi todas las ocasiones que me dejé ver por aquí era porque era yo la que no sabía cual era mi identidad.
Es una tontería, pero a veces al escribir lo que piensas, lo que sientes, las cosas adquieren un nuevo sentido, un nuevo giro de tuerca que, quien sabe, puede cambiar tu rumbo en un segundo inesperado.
La conclusión es que yo he cambiado, mi vida ha cambiado, aunque siga teniendo esa esencia... valquiria.
En mi mano siento un roce, y cada día calienta más esa parte de mi que quedó fría por la vida... no sentir.
Deja que ese calor me invada, porque eso me hace sentir viva, y abrásame si hace falta, que ya habrá tiempo de que el agua temple la marea.
Tengo miedo a las sombras en la oscuridad, miedo a los sueños imposibles, miedo a mis limitaciones, miedo en parte... a mí misma, y a llegar a mi tope, y a no poder dar más.
Porque sigo soñando despierta.
Con mundos donde no existen monstruos, donde no importa el error sino lo que aprendiste de él, donde no existen complejos, ni malas miradas, ni el espejo se ríe de ti en tu cara.
Sin embargo ya todo me da más igual. Ahora tengo otras razones por las que luchar un tiempo más.
Tengo un alma llena de arte (o eso intento), tengo un proyecto de futuro (no tan estable como quisiera, pero no me gustaría que fuera de otra manera), y tengo... tengo...
Además de por lo que he dicho antes, escribo por miradas indiscretas que no esperan sino encontrar algo más de lo que yo soy, aunque en casi todas las ocasiones que me dejé ver por aquí era porque era yo la que no sabía cual era mi identidad.
Es una tontería, pero a veces al escribir lo que piensas, lo que sientes, las cosas adquieren un nuevo sentido, un nuevo giro de tuerca que, quien sabe, puede cambiar tu rumbo en un segundo inesperado.
La conclusión es que yo he cambiado, mi vida ha cambiado, aunque siga teniendo esa esencia... valquiria.
En mi mano siento un roce, y cada día calienta más esa parte de mi que quedó fría por la vida... no sentir.
Deja que ese calor me invada, porque eso me hace sentir viva, y abrásame si hace falta, que ya habrá tiempo de que el agua temple la marea.
Sin más silencios que contar... Valquiria
